R.Cornejo
Se disputan los Playoffs de la NBA. Uno de los mayores espectáculos del mundo, que más dinero mueve, con una expectación planetaria... Bueno pues allí ocurre un hecho interesante.
En los partidos, entre cuarto y cuarto, el entrenador de cada equipo está obligado a hablar para la televisión en directo. El descanso entre cuarto y cuarto no es la parada que se hace entre el primer y el segundo tiempo. Se para el partido muy poco tiempo para que el entrenador hable, felicite o eche la bronca a sus jugadores. Es un tiempo en que el partido sigue vivo. Bueno pues en ese espacio el entrenador debe dejar su trabajo en el banquillo para conceder una entrevista. Le guste o no. Y ya os digo que no les gustará.
Por ejemplo. Un equipo pierde de veinte puntos. Llega ese pequeño descanso. El entrenador está preparando una serie de indicaciones importantes para sus jugadores. Pues debe dejar ese momento clave para hablar con la prensa.
Los medios o periodistas, ¿deben estar contentos por esto? Se consiguen unas declaraciones en exclusiva pero se invade una parte importante del trabajo de una persona. Y todo por dinero. ¿Realmente son declaraciones tan importantes? Como amante del periodismo y la información me alegro. Como amante del baloncesto no tanto.
Fdo. El Quinto Cuarto
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